sábado, 28 de julio de 2012

La regla no escrita capitulo 32

eugenia no me perdona. Ella ni siquiera me habla. Intente llamarla pero no contesta el teléfono, y si su madre lo hace, ella llama a eugenia, quien nunca llega. Algunas veces escucho a la madre de eugenia empezar a gritarle, preguntándole si ella cree que es la única persona en el mundo antes de que se corte la conexión y el silencio caiga. eugenia preferiría escuchar a su madre que a mí.
Mis padres saben lo que pasa, por supuesto, o al menos han adivinado la mayor parte de ello. ¿Cómo podrían no hacerlo? Ya eugenia no viene y gaston… Bueno, no lo escondo. No quiero hacerlo.                            —¿La extrañas? —mamá me dice una noche después de que gaston se haya ido, él está dibujando otra serie de imágenes de manos, y está fascinado con las de papá; y yo asiento. Ella está cocinando de nuevo, pero no tan intensamente como antes. Ella todavía habla acerca de concursos de cocina, pero no tanto, y sólo va a entrar en tres el año que viene en vez de en tantos como pueda. —Algunas veces… algunas veces tienes que dejar que la gente se vaya —dice—. eugenia te quiere, rocio, pero no creo que ella siempre haya sido una buena amiga para ti.                                                              —Yo tampoco fui exactamente una buena amiga para ella —digo, y mamá pone un brazo alrededor de mí.                                                       —Tal vez no, pero creo que tú le hubieras perdonado cualquier cosa —ella besa mi mejilla—. Así que, tu y gaston…                                     —¡Mamá! —Sólo iba a decir que pareces feliz —dice, y escucho a papá riéndose en el otro cuarto. Su cadera no ha mejorado, nunca estará mejor, pero no está peor. Al menos, no todavía. En la escuela, eugenia mira justo a través de mí, no se da la vuelta si camino hacia ella pero sólo me mira como si fuera nada, como si no estuviera ahí. Estoy segura de que debe haber un millón de gente esperando para estar con eugenia, por estar a su lado, por estar donde yo estuve, por ser su mejor amiga, pero eso no ocurre. Nadie parece odiarme realmente o a gaston por estar juntos, aunque noto que algunas chicas sostienen las manos de sus novios, un poco más fuerte cuando camino cerca de ellos. La mayoría de ellos son amables, de todos modos, y me encontré a mi misma hablando con gente con la que no había hablado antes aparte de un rápido                                                        ―Hola‖ o ―¿Escuchaste cual es la tarea?‖ porque siempre había tenido a eugenia. Me encontré a mi misma haciendo cosas como ir de compras y al cine y reírme de la escuela, y es genial, pero no es, no es como lo era con eugenia, y la extraño demasiado.
Veo a eugenia con otras personas, pero ellos flotan adentro y afuera, no se quedan a su lado. Algunas veces se acercan a mí y dicen cosas como,                         ―¿Cómo pudiste soportarla?‖ o ―Bien ¿Puedo preguntarte algo? ¿Ella
siempre dice cosas que piensa que son amables o de ayuda pero totalmente no lo son?‖                                                                       —Ella no se refería a como sonaba —siempre digo—. Ella sólo quiere—ella es una buena amiga —y ellos me miran sin comprender, como si fuera un rompecabezas que ellos no entienden. Algunas veces solo dicen—. Eso no es lo que ella dijo de ti —esos son los que se iban volando más rápido. Ella obtuvo el papel principal en la obra de la escuela, y no estoy ahí cuando lo descubre. No logro escuchar cómo va a interpretar a Romeo como una chica, no logro escuchar cómo se siente acerca de Henry siendo su Julieta. Puedo imaginarlo, pero no es lo mismo. No estoy ahí. No escucho de las practicas, acerca de cómo se está aprendiendo las líneas. No escucho acerca de la noche de estreno. No sé quien estuvo con ella, si uno de sus padres finalmente fue y la vio brillar. No escucho nada acerca de ella. Ella empieza a salir con nico. Él tampoco me habla, mantiene su brazo firmemente alrededor de eugenia cuando están juntos, sin flirtear con nadie más, y escucho a la gente decir que son felices. Que eugenia dice que gaston es un perdedor y que ella está feliz de estar con un chico de verdad, uno que sabe lo que está haciendo. gaston sonríe cuando le cuento, y luego su sonrisa se desvanece.                —rocio —dice, envolviendo sus brazos alrededor de mi, e incluso ahora, incluso cuando extraño tanto a eugenia, ahí está la emoción de estar con él, de saber que puedo mirarlo sin culpa, que puedo tocarlo libremente. Que estamos juntos.                                                             —No me importa lo que ella diga —dice él—. ¿Pero a ti, a ti te importa?           —No acerca de tú y yo. Pero yo… yo la extraño —digo, y él me mira, con sus ojos profundos. Concentrados sólo en mí.                                    —Lo siento —dice él, y sé que lo siente. Sé que desea que las cosas entre ellos hubieran terminado de un modo que no me hubiera arrastrado a mí. Sé que desea haberse quedado y hablado conmigo esa primera noche, esa noche de verano en la fiesta. Sé que desea que las cosas hubieran empezado de una manera diferente para nosotros, y yo también lo hago. Pero no siento estar con él, y me pregunto si eugenia sabe eso. Si es por eso que ella no quiere hablarme.
Una tarde, casi cinco meses después de la mañana en que eugenia dejo mi casa sin mirar atrás, le digo a gaston que tengo que hacer algo después de la escuela. Él me besa, y por un segundo el mundo es perfecto. Amo ese sentimiento. Lo amo a él. Pero todavía extraño a eugenia. Y por eso, después de la escuela, voy a verla.
                                                                                                                              adaptacion

2 comentarios:

  1. muy buen capitulo me encantan que esten juntos los rubiosaun k m da miedo el siguiente capitulo

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  2. Eugenia, bueh, que se yo. Amo lo que son Gas y Rochi, tiernos!

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