domingo, 28 de julio de 2013

Casi capitulo 16

Capítulo 16
::Rochi::
tap. Tap. Tap.
Intento ignorar el sonido y tiro de mi cobija de auto
sobre mi cabeza para que así pueda volver a dormir,
excepto que no puedo. No es uno de los sonidos habituales: no es el
viento, no es el suave patrón de la lluvia, tampoco los fuertes golpes que
vienen con el granizo. Es…
Tap. Tap. Tap.
Definitivamente tampoco es el sonido de rasguño que hacen las
ramas. ¿Podría ser un pájaro?
Tap. Tap. Tap. Tap. TAP.
El sonido se mueve hacia el cristal más cercano a mi cabeza. Ningún
ave podría ser responsable de eso a menos que un colibrí espástico esté
tratando de abrirse camino para atacar. Me quito la cobija.
Gaston. Por supuesto.

Se ve todo ridículo. Sonriendo con esa desgarradora media sonrisa a
la que no puedo acostumbrarme. Una sonrisa que en realidad me ha
servido bien las últimas noches. Cuando estoy a punto de quedarme
dormida, sólo pensar acerca de esa sonrisa ligada a él me da un gran
ataque de adrenalina y me salva de quedarme del todo dormida.
Desafortunadamente, a la luz del día, y en persona —el efecto es
doble. Ahora, todo pensamiento sobre tomar una siesta es borrado por el
acostumbrado monzón de mariposas que se apodera de mi cuerpo cuando
está cerca. Y se ve tan feliz de verme, no puedo estar molesta porque me
haya robado preciosos minutos de sueño de día. ¿Por qué tiene que ser
tan… perfectamente hecho? Es irritante.
Actuando como si hubiera sabido que estaba allí todo el tiempo,
abro la puerta de mi lado para obligarlo a dar un paso atrás mientras lanzo
uno de mis aburridos suspiros.
—No hay necesidad de que me acoses. Dije que sería tu novia hace
unos días. Estás aquí temprano, ¿a qué se debe?
Se inclina en el borde de mi puerta abierta y sonríe abajo
directamente a mis ojos.
Hasta mi corazón. Donde no quiero que esté.
—Para tu información, sobresalir. De hecho estamos un poco tarde.
Además, es una actividad típica de novio que rastree el auto de mi novia.
—¿Lo es?
—Sip, tengo que estar alerta de si me estás engañando. Si no te
conociera mejor, asumiría que andas de fiesta un montón y escondes tus
momentos de resaca de tus padres en tu vehículo. ¿Siempre tomas una
siesta antes de trabajar?
—Estaba meditando.
—Mentira. Nadie babea así cuando está meditando.
Doy la vuelta para tomar mi bolsa junto con dos Red Bulls con doble
cafeína y salto hacia afuera.
Caemos en un paso regular, dirigiéndonos hacia la entrada de
empleados de Geekstuff.com.
—Espero que ese no sea tu desayuno. —Señala a mis bebidas.
—Es un bocadillo. Comí cereal a las 4:00 a.m. Gracias por… um…
detenerte a caminar conmigo. —Seco las esquinas de mi boca—.
¿Realmente estaba babeando?
—Estás evitando mi primera pregunta. La que es acerca de ti
durmiendo en tu auto antes del trabajo… ¿por qué? ¿Y por qué estabas
comiendo cereal a las 4:00 a.m.?
Contemplé mentir, y luego no le vi sentido. Ya me había atrapado
dormitando como una idiota dos veces.
Podría hacer las cosas más fáciles si sabía la verdad. —Yo… yo
duermo durante el día. Del amanecer hasta el anochecer. En cualquier
momento que pueda.
—¿Por qué? ¿Eres alguna especia de caza recompensas de
vampiros/asesina de zombis durante toda la noche? Si es así… aún me
apunto, porque eso es sexi. —Sonríe.
Me detengo un escalón por encima de él y me vuelvo para detener su
progreso mientras borro todas las cosas que no quiero que sepa sobre mí
de mi respuesta. —No duermo muy bien cuando está oscuro porque
algunas veces tengo —algo así como— terrores nocturnos. Si tengo suerte,
me las arreglo para no dormir nada. Así que, estoy muy cansada. Uso mi
auto para ponerme nivelar durante el día. ¿Alguna otra pregunta,
preguntón? —Terminé con una enloquecida sonrisa.
—Guau. Eso apesta. —Está frunciendo el ceño.
—Es lo que es. Sólo una parte de ser yo. —Apunto mi sien—. Lo
manejo sólo bien. —Miró lejos de su mirada demasiado intensa y me doy
cuenta de cuán lindos son sus cabellos cuando están húmedos. Estoy
bastante segura que la lima y el olor a fresco viene de su champú. Un día,
voy a ser lo suficientemente valiente para preguntarle sobre ello. Quizás.
—¿Me dejarás saber si tú… tú sabes… necesitas ayuda o lo que sea?
—dice suavemente.
—¿Ayuda durmiendo? ¿Qué te hace pensar que necesitaría ayuda
con lo que sea? —espeto, irritada de que este chico tenga el poder de
convertirme en una chica idiota que piensa acerca de champú de chicos.
—Nada. Pero por si acaso… si necesitas hablar… o…
—Por favor. He estado durmiendo en mi auto años antes de que tú
aparecieras. No es un maldito ―llanto de ayuda‖ así que retrocede, Sir
Lancelot. Estaciona tu corcel blanco en la vida de otra chica. Sólo te lo dije
para que me dejaras de molestar acerca de ir de excursión contigo en el
almuerzo. Necesito esa hora para dormir.
—Oh. Correcto. —Aparta la mirada, y me siento un poco mal
porque pienso que he herido sus sentimientos.
—Mira, sí aprecio que te preocupes. —Suavizo mi tono—. Estoy
muy acostumbrada a esta situación. Estoy bien. Genial de hecho. Este
trabajo, pasar el rato en la pista… las cosas no podrían ir mejor. Mi primera
ronda de aplicaciones para la universidad está casi terminada. Y, debido a
que tus... quiero decir… los mensajes de texto diarios de Peter traen
un color constante a mis mejillas, mis padres están emocionados. Sólo
sigue haciendo lo que estás haciendo. Eso es suficiente. No hay necesidad
de ofrecerte voluntario donde no eres necesitado, eso es todo.
Se encoge de hombros pero no puedo descifrar la mirada en su
rostro para salvar mi vida. De repente estoy preocupada de que vaya a
preguntar una tonelada más de preguntas.
En cambio dice: —No babeas. Estaba bromeando. —Me da su
sonrisa de lado y el hoyuelo aparece.
—Insufrible —le respondo, aliviada de que lo haya dejado pasar.
—Obstinada. —Sonríe.
Caminamos por las puertas juntos y agrega: —Pero la manera en que
tu boca cae abierta cuando duermes deja espacio para posible futuros
babeos. Pensé que deberías saberlo.
—¿Ah sí? —Tengo que reírme porque está meneando sus cejas
negras como tinta hacia mí.
—Bueno la manera en que tu…
—Ustedes dos están diez minutos tarde. —El Señor Foley nos
atrapa en el pasillo que lleva a nuestra minúscula oficina. Ambos nos
ponemos serios al instante.
Me sonrojo cuando me encuentro con la mirada de acero del Señor
Foley. —Lo siento, señor. Tomo la responsabilidad completa. Gaston estaba
a tiempo. Él se detuvo para… ayudarme con un problema en mi Jeep. —
Como, yo. El problema de mi Jeep.
El Señor Foley se ajusta sus lentes, entornando los ojos como si a
penas nos pudiera ver por sus lentes doble de ancho. —Sólo no hagan de
esto un hábito. Tienen una oportunidad antes de cabrearme. Consideren
este momento el final de su única oportunidad. Simplemente porque es
llamado una pasantía no quiere decir que no es un verdadero trabajo.
Usted es la que accedió a hacer esto sin paga, Señorita Igarzabal. No sentiré
lástima por usted acerca del acuerdo que hizo, ni tampoco esperaré menos
de su trabajo.
—No, señor. No sucederá de nuevo —digo, jurando ajustar la
alarma de mi iPhone en un tono más alto tan pronto como llegué al baño
de damas.
—Yo tampoco llegaré tarde de nuevo—añade Gaston
—Bien. —El Señor Foley asiente con la cabeza satisfecho—. Voy a
ponerlos a ambos en el equipo para la feria de TOYTECH11 Digital, a partir
de hoy. La última cosa de la que necesito preocuparme es que uno de
ustedes tenga una inasistencia.
—¿Digital qué? —pregunta Gaston
—FTD para abreviar —dice el Señor Foley—. Es la feria donde
lanzamos nuestras nuevas adquisiciones de productos, y con suerte,
atraemos algunos comerciantes internacionales además de nuevos
clientes. Este año la feria es en nuestra propia casa. el catorce de
julio. Atrae a más de 100,000 personas durante un fin de semana largo.
Ustedes dos desembalaran y rempaquetarán una tonelada de cajas.
También armarán nuestro stand de regalos. Estos son los mini juguetes
Geekstuff.com de alta calidad que repartimos cada año. Vamos a lo grande
ya que no tenemos que pagar ningún costo de envío. Si trabajan duro,
dejaré que ambos estén en el stand durante la feria. Es muchísimo trabajo
desagradable con doble diversión al final. ¿Algún problema con esta tarea?
—Claro que no —dice Gaston—. Es mejor que estar atiborrado,
quiero decir, mejor que estar sentado en una pequeña oficina todo el día.
—¿Cuándo y dónde empezamos? —digo, controlándome para no
saltar de la emoción—. He estado una vez en la FTD como recolectora de
11 Toytech: Compañía que fábrica juguetes tecnológicos.
boletos. Es la mejor. ¡Trabajar en un stand de una empresa real, en el stand
de su empresa, va a ser genial!
El Señor Foley sonríe. —Diríjase a la recepción de mercancías —
dice él—. Hay cincuenta y dos cajas de unidades USB en forma de rana
que acaban de llegar de nuestro fabricante chino. Cada uno necesita ser
abierto, desembalado, registrado en el sistema, cargado con nuestro más
reciente folleto de marketing, enganchado a un llavero y a un nenúfar12, y
luego vuelto a empaquetar para lucir como este. —Él lanza un objeto hacia
mí. Me estremezco y no lo atrapo. Una mancha verde golpea el suelo.
—Lo siento. ¡Casi te saco un ojo! —El señor Foley parece
estar conteniendo la risa. Juro venganza cuando oigo a Gaston riendo
mientras recojo el brillante nenúfar con la palabra ―Geekstuff.com‖
impresa en el borde exterior. Hay una rana arborícola verde neón y
brillante apoyada sobre un genial nenúfar de plástico blanco que está
conectado a esta. Un llavero con ―Geekstuff.com‖ impreso en letras
negras, ha sido creativamente único a una pequeña mosca en la lengua de
la rana que está ligeramente sobresaliente.
—Genial. Pero, ¿qué es esto? —pregunto.
—Jala la lengua —dice el señor Foley.
Lo hago. Cuando sale, veo que es una unidad USB. —Es tan lindo —
digo.
—Esperemos que sigas pensando eso después de armar cinco mil de
esos. Les debería tomar un par de días solo para abrir y clasificar las cajas.
Estimamos una semana entera para el armado. Es el producto para llevar
más complicado que hayamos entregado alguna vez. El proyecto que sigue
les parecerá simple después. Tienen que instalar mini-cámaras en forma
12 Nenúfar: Planta acuática de la familia de las ninfeáceas, con hojas enteras, casi
redondas, que flotan en la superficie del agua, y flores amarillas o blancas.
de mariquitas sobre un girasol. No es tan complejo pero tendrán que hacer
el doble por lo menos.
—¿Cinco mil ranas y diez mil mariquitas? —pregunta Gaston.
—¡Sí! —El señor Foley toma de nuevo la rana, el nenúfar y los
sostiene con orgullo—. Esta pequeña rana soporta 64 gigas de datos. La
mariquita es incluso más genial. Es una cámara además de un dispositivo
de almacenamiento USB. ¡Soporta 128 MB y captura dos minutos de video
de alta calidad y sonido! El estómago esconde un monitor del tamaño de
un sello. Espera a que lo veas. Fueron donados por Fitzu, nuestro
patrocinador Japonés. ¿Han oído de ellos?
—Sí. Cámaras digitales, televisores y electrónica —digo intrigada.
No puedo esperar para ver la mariquita.
El señor Foley asiente con la cabeza. —Nuestro stand es famoso por
tener los productos más geniales. La mariquitas y las ranas son solo la
mitad de lo que vamos a distribuir.
—¿Cuál será la otra mitad? —pregunta Gaston, pero creo que no
quiero oír la respuesta.
Los ojos del señor Foley están brillando de la emoción ahora. —
Vamos a armar mini barras de luz. Solo se trata de réplicas que te
permiten enviar un mensaje de texto a alguien más con la misma barra de
luz. Interconectadas claro. El mensaje es enviado y recibido en la
empuñadura de la barra que titila al recibirlo. Muy genial. Habrá veinte
mil de ellos, en total. Esperamos darle uno a cada grupo familiar que visite
el stand, y entonces vender unos extras a los amigos y familiares que
quieran llevarse uno a casa. Hemos logrado récords de ventas con ellos en
año pasado.
—¿Dijo veinte mil, señor? —digo, tratando de no hacer una mueca.
El señor Foley asiente con la cabeza. —No es mucho trabajo armar
esos. Sólo tendrán que conectar las diferentes barras de colores sobre la
fuente de luz. Estoy pensando en ponerlos a armar más para tener en el
almacén para el caso en que haya cualquier orden temprana que estamos
seguros habrá la semana durante la feria.
—Oh. Genial. Estoy ansiosa por hacerlo —miento, sintiéndome de
repente abrumada. ¿Cómo diablos voy a ser capaz de permanecer
despierta todo el día, construir pequeños juguetes de plástico, tener
tiempo para ―salir con mi novio‖, y seguir arreglándomelas para mantener
los ojos abiertos, ADEMÁS de mantener a mi mente alejada de pensar en
dormir toda la noche?
La sonrisa de Gaston me da energía, pero no tanto.
Voy a desmoronarme. Morir. Se me podrían salir los ojos. Mi
cerebro se derretirá.
—Sí, es un montón. —Está diciendo el señor Foley—. Cada año el
interno ha conseguido sacar este proyecto adelante solo, aunque nunca
hemos pasado por algo así antes. Debería ser fácil para los dos lograrlo
juntos.
—Dijo que este trabajo implicaría una labor agotadora. Estamos
felices de ser elegidos señor —dijo Gaston, usando la graciosa voz Yoda.
Quiero rodar los ojos. Él es tan bueno lamiendo las botas en los
momentos indicados. —Sí, esto será genial —agrego yo, forzando a mi
tono a sonar tan emocionado como el de Gaston—. Si nos atrasamos, ¿podría
llevarme un montón a casa y trabajar ahí? —pregunto, pensando que así
podría compensar cualquier flojera en medio de la noche.
—De ninguna manera. Los juguetes de la feria son alto secreto. No
los quiero fuera de la propiedad hasta el gran fin de semana. Sólo
manténganme informado sobre su progreso. Si se atrasan, pondré a uno o
dos chicos de transporte marítimo —dice el señor Foley—. Además
quiero que ambos tengan algo de diversión este verano. Trabajen duro,
pero no se maten. Los internos no deben llevarse el trabajo a casa.
Me siento como si de repente hubiera sido envuelta en una niebla
mientras el Señor Foley le lanza el combo de la rana y el nenúfar a Gaston. Él
lo agarra sin problemas. Por supuesto que lo hace.
Suspiro y le dirijo una mirada envidiosa.
No porque tenga coordinación y tan buenas habilidades sociales,
sino porque se ve tan despierto.


No hay comentarios:

Publicar un comentario