-
despierta bella durmiente – susurró
Gastón regando besos en el cuello de la joven.
Rocío gimió adormilada y se giró dándole la espalda. Él rió
y comenzó a hacerle cosquillas sin piedad.
-
Gas... no... dejame... Gas - lo llamó ella entre risas con la voz pastosa
por el sueño. - quiero dormir, dejame dormir.
Gastón bufó.
-
llevas dos días sin salir de la cama.
Rocío lo miró enarcando una ceja.
-
¿y de quién es la culpa?
Gastón sonrió de una manera puramente masculina y la besó
hasta dejarla sin aire.
-
mía, totalmente mía.
Ella rió como una colegiala.
-
¿¿Que es tuya??
-
la culpa, toda tú, todo es mío.
La risa de ella inundó sus oídos.
-
Eso no es justo, ¿¿y a mí que me
queda??
Gastón alzó los
brazos y le sonrió pícaramente.
-
Todo yo, esta persona totalmente sexy –
la miró socarronamente- eres afortunada.
-
¡Ja! - Rocío alzó una ceja y
encogiéndose de hombros se giró dispuesta a dormir.
-
¡ah no!, de eso nada – dijo él
arrancando las sabanas que cubrían el cuerpo de la joven.
-
Ella se hizo un ovillo en el centro de la cama y se cubrió
con sus brazos.
Antes de saber que pasaba se vio siendo cargada en brazos.
-
Gas, ¿Que tienes en contra del concepto de
buen sueño? - preguntó pasando las manos por el cuello del joven y apoyando la
cabeza de su hombro.
-
Nada, pero creo que podemos hacer cosas
mejores que solo dormir.
Rocío casi ronroneó.
-
¡Ah! ¿Si? ¿como que?
Gastón sonrió travieso.
-
ya veras.
Rochi abrió los ojos como platos cuando él abrió la puerta y
la sacó al exterior.
-
¡Gastón Dalmau! ¿A donde me llevas? -
preguntó escandalizada cuando la brisa fría impactó contra su piel desnuda.
-
A un lugar -fue lo que recibió por
respuesta.
-
Gaston, estoy solo en ropa interior.-
se quejó y él le respondió con un beso arrebatador.
-
Si, y te ves increíblemente sexy.
-
Estamos en el exterior, es indecente
esto – dijo ella medio en broma, medio enserio - ¿que pasa si alguien me ve?
-
Lo mato – contestó él encogiéndose de
hombros.
Ella rió
-
¿puedes
decirme a donde me llevas?
-
Nop.
-
Gas...
-
es
una sorpresa, si te lo digo no es más sorpresa.
-
No
me gustan las sorpresas – dijo ella enfurruñándose.
-
No
me importa – contestó él en el mismo tono obstinado de ella.
-
¿Por
que caminamos hacia el bosque? - preguntó Rocío cuando Gastón se detuvo frente
a la hilera de maleza y arboles .
-
Porque
hacia allá está tú sorpresa – dijo él poniéndola en el suelo.
Gas se
colocó tras ella y antes de que pudiera decir nada le vendó los ojos.
-
Gas
– a voz de Rocío sonó temblorosa - ¿Que haces? ¡No veo nada!
-
Esa
es la idea – rió él y la hizo comenzar a caminar.
...
-
es
precioso – dijo Rocío observando la pequeña cascada de agua cristalina frente a
ella.- es como un pequeño paraíso escondido.
Los arboles
gigantes a su alrededor los envolvían dando la sensación de refugió y el sol
que se colaba entre sus ramas danzaba sobre el pequeño arroyo y las rocas a su
alrededor.
-
nuestro
paraíso – dijo Gastón envolviendo sus brazos alrededor de la cintura de la
joven.
Rocío
suspiró y se giró para verlo.
-
Mi
amor... - Gastón la interrumpió con un beso. - Gas...- se quejó riendo.
-
Perdón
– se defendió él – es que adoro cuando me llamas mi amor.
Rocío rió y
luego acarició su rostro.
-
Gas,
debemos regresar.
-
¿Ya
quieres volver a casa?
Ella negó
con la cabeza seriamente.
-
Hablo
de volver a mundo real. Tenemos que volver al pueblo, no me puedo quedar aquí
de por vida. Me encantaría que esto no acabe nunca, pero corremos el riesgo a
que Pablo nos encuentre y no pienso seguir viviendo con miedo. Debemos terminar
con esta pesadilla y no podemos hacerlo desde aquí.
Gastón
suspiró.
-
Lo
sé. ¿quieres volver ahora?
Rocío lo
pensó un segundo y luego sonrió de manera traviesa.
-
NO
– gritó antes de empujarlo al pequeño pozo.
–
pequeña
bruja – se rió Gastón cuando salió a la superficie. - ven a darme un abrazo –
dijo malevolamente mientras corría tras ella para mojarla con su cuerpo.
Rocío
impactó contra el agua fresca, cuando Gastón la tiró, y rió encantada al salir
a la superficie.
–
Te
queda bien el estilo mojado – se burló de Gastón al ver como su largo pelo
rubio caía sobre sus ojos.
–
Sale
corte ¿no? - sonrió él nadando hacia ella.
–
Mmm
– ella pareció pensarlo – si, me parece que si.
–
Cuando
lleguemos al pueblo aprovechare e iré a una barbería.
A Rocío se
le ensombreció el rostro y nadó hasta la orilla para sentarse sobre una enorme
roca.
–
Cuando
volvamos al pueblo – susurró suspirando.
–
Cariño – Gastón se reunió junto a ella – sé
que no quieres volver, pero debemos hacerlo, tú misma lo dijiste.
–
Lo
sé. Solo... ¿para que Gastón? No hemos tomado ninguna decisión. ¿Voy a volver
con Pablo?¿Hasta cuando?¿Que pasara con nosotros cuando volvamos al mundo real?
Gastón se
sentó junto a ella y la abrazo.
–
Creo
que depende de lo que quieras hacer y lo que estés dispuesta a hacer para
conseguirlo.
Ella lo
miró.
–
¿a
que te refieres?
–
¿Que
quieres que pase con nosotros?
Rocío lo
miró.
–
Te
amo Gastón, quiero que estemos juntos.
Gas la besó
larga y lentamente.
–
Entonces
lo primero que voy a hacer será consultar a un abogado para encontrar la manera
de que puedas divorciarte sin que Pablo te perjudique.
–
¿Pero
la foto?
–
Ahí
entras tú, necesito que la encuentres, no podremos hacer mucho contra esa
prueba, aunque yo seguiré investigando.
–
¿quieres
que regrese con Pablo y le quite la foto? Llevo años buscándola, no será tan
fácil.
–
Lo
sé, y esa es otra decisión tuya, puedes volver con Pablo y buscar las pruebas o
quedarte en algún otro lado.
–
¿como
en donde?
–
Peter
me dijo que no tendría ningún problema con que te quedaras con él. O puedes
quedarte conmigo.
Rocío
sonrió a medias.
–
No
puedo quedarme contigo Gastón, y no creo que debamos importunar a Peter, además
viviendo con Pablo tendré más oportunidad de dar con las fotos. Ya he vivido
con él, sé como manejarlo.
Gastón suspiró
y la besó en la frente.
–
Lo
entiendo, no digo que me guste pero lo entiendo. ¿cuando quieres regresar?
–
Nunca
– Rocío se puso en pie caminó hasta un pedazo de grama verde que crecía junto
al arroyó. - pero creo que lo mejor es hacerlo hoy, de lo contrario
probablemente nunca salga de aquí.
–
Eso
no suena tan mal – dijo Gastón tomándola de la mano y sentándose en el pasto
junto a ella.
–
No,
no lo hace – Rocío lo miró y sin pensarlo se sentó a horcajadas sobre él –
¿pero sabes que suena mejor?
Gastón la
tomó por la cintura y pensó que se veía gloriosa, como una diosa bañada en oro
con su largo pelo suelto y su sedosa piel mojada y brillante a contra luz.
–
No,
¿que suena mejor?
Rocío se
inclinó hacia él con sus ojos verdes de hechicera y sus labios rojos a
centímetros de los suyos.
–
Que
me hagas el amor.
Y Gastón
como hipnotizado obedeció.
...
- Hogar,
dulce hogar supongo - dijo Gastón dejando las cosas que cargaba en el pasillo
de la entrada.
–
Es
extraño ¿no? - Rocío miró a su alrededor y frunció el ceño - volver. Saber que
tengo que regresar con Pablo.
Gastón
rechinó los dientes
–
lo
sé. No me lo recuerdes.
–
será
solo una temporada Gas, pronto estaremos juntos de nuevo – dijo ella besándolo.
–
Lo
sé, pero será eterno para mi. - dijo él haciendo puchero.
–
Y
para mi, pero piensa que luego podremos estar juntos.
–
Eso
suena a gloria – sonrió él tomándola por la cintura.
Rocío lo besó y entre tropezones y
besos fueron subiendo por la escaleras para llegar al cuarto.
Una música
lenta y seductora comenzó a sonar y ambos se detuvieron en seco frente a la
puerta del dormitorio de Gastón.
Rocío tomó
el pomo de la puerta y la giró lentamente.
Ambos se
quedaron paralizados con la escena.
Una mujer
con un conjunto de ropa interior roja de sujetador, braguitas y liguero estaba
seductoramente acostada en la cama de Gastón.
Rocío miró
a la mujer y luego a Gastón cuando este susurró.
–
¿¿Daniela??

hey soy nadia increible como siempre no me puedo creer lo de daniela esto se empieza a poner aun mas interesante de lo que ya estaba jajaja mucha suerte sigue asi
ResponderEliminarParaaaa.. Justo ahora tenia que aparecer? Y de esa forma? Aggh
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