Amor en Desencuentro... Capítulo 52

Hello!! Acá les dejo un nuevo capítulo de Amor en Desencuentro. No soy Alezz, soy Aguzz jajaja. Alezz está de viaje en Estados Unidos por un par de meses para aprender ingles y conocer a la people y la culture jaja. De todas maneras Alezz va a seguir escribiendo capítulos y nos lo va a mandar por mail a alguna de las otras escritoras para que lo postiemos.

Sin mas preámbulos las dejo alone con el super cap! que le pasará a Rochi??
ENJOY!

 Pablo observó a Daniela entra como una furia.

- ¿¿Tú te volviste loco??

Él ni siquiera pestañeo.

- ¿¿De qué estás hablando??

- ¿¿crees que no sé que fuiste tú quién atacó a Gastón??

- Cuando Gastón fue “atacado” yo estaba con Rocío.

Daniela bufó.

- Como si eso te librara de toda sospecha, ¿¿Qué estás haciendo?? El juego es debilitarlos por dentro y separarlo, no matarlo ¿¿En qué diablos pensabas??

- En que cambiaron las reglas Daniela, ya no se trata de alejarlos, sino de destruirlos y verlos morir de dolor.

Daniela miró al monstro que había ayudado a crear y sintió nauseas, temía por Gastón, él jamás había sido malo con ella, muy al contrario siempre la había ayudado y ella ¿cómo no? Lo amaba a su manera, ahora sabia que al ayudar a Pablo, lo había condenado a la muerte.

- Pablo razona, yo necesito la plata y tú amas a Rocío, solo… ayúdame a separarlos no tiene que salir nadie lastimado.  

- Tu no lo entiendes Daniela – Pablo se puso en pie – ella es una perra maldita que nunca me amó. Y yo no estoy dispuesto a permitir que otro obtenga lo que ella me negó.

- Eso es enfermizo no la puedes obligar a amarte.

- Daniela – Pablo la miró como si se tratara de una niña que no entiende – este ya no es tu juego. Quieres la plata, adelante, tómala, yo te la daré pero desaparece y olvídate de todo esto.

Ella lo miró en silencio.

- ¿¿Qué vas a hacer tú??

El sonrió.

- Deshacerme del problema.

Daniela dio un paso hacia él.

- No dejaré que le hagas daóo a Gastón. Esto llegó demasiado lejos Pablo.

Él la miró sonriendo.

- ¿¿Y qué vas a hacer para detenerme?? Así como voy a eliminarlos a ellos puedo eliminarte a ti. Créeme, no quieres ponerte en mi contra, corre mientras puedes, toma lo que te ofrezco y bórralo de tu mente.

- Esto podemos solucionarlo juntos, de otra manera, no debe haber sangre de por medio… tu, no debes ensuciarte las manos.

Pablo soltó una carcajada.

- ¿¿Sabes cuánta sangre hay en mis manos?? – ella retrocedió un paso y él rió – desaparece Daniela, esto es más grande que tú.

- No Pablo, no voy a permitir que hieras a Gastón.

Pablo la tomó por el brazo y antes de que Daniela pudiera reaccionar se encontró presionada contra la pared mientras él afincaba un cuchillo en su cuello. El frío metal cortó lentamente la blanca piel de Daniela mientras ella forcejeaba con soltarse y el miedo la inundaba.

- Shhh – Pablo susurró en su oído – si te mueves es peor y el dolor será más grande.  

- Suéltame – imploró ella sintiendo como sus ojos se llenaban de lágrimas.

- Hazme caso Daniela, acepta lo que te estoy ofreciendo y huye lejos, nunca mires atrás.

Daniela se montó en un avión esa misma tarde con dinero en un sobre, los ojos llenos de lágrimas y un “Perdóname Gastón” en los labios.

…

Rocío sintió como si le hubiera golpeado la cabeza con un mazo, abrió los ojos lentamente para volver a cerrarlos por el fuerte dolor. No recordaba nada y sentía el cuerpo rígido y dolorido.

Volvió a abrir los ojos lentamente y estudió su alrededor.

Blancas paredes iluminadas por la luz del sol que entraba por la enorme ventana. Miró a la derecha y observó su brazo conectada a una maquina, a su derecha alguien dormía.

Rocío se incorporó y despeinó el cabello rubio de Gastón. Este dio una sacudida y se puso en pie desorientado. La miró durante un segundo y luego corrió a su lado.

- Mi vida – su rostro reflejaba cansancio -  Mi cielo, estas despierta, ¿¿Cómo te sientes??

Ella se incorporó un poco.

- Confundida, ¿¿Dónde estoy??

- En el hospital.

- ¿¿Cuánto tiempo llevo aquí??

- 3 días.

- ¿¿Qué pasó??

El rostro de Gastón reflejó preocupación.

- Tuviste un accidente.

Ella asintió. Lo recordaba.

- Y como llegué aquí??   

Gastón pasó una mano por su rostro.

- Te encontré. – la preocupación hirviendo en su mirada. – decidí ir a raptarte aprovechando que pablo no estaba y encontré tu auto – tomó el rostro de ella en sus manos – no sabes lo asustado que estaba cuando te encontré. Luego te traje aquí.

Ella sintió.

- Y Pablo??  Dónde está??

A Gastón se le ensombreció la mirada.

- Fue Pablo?? Él te hizo esto??

Rocío negó con la cabeza aunque el movimiento le causó dolor.

- No sé quién fue, no logré ver pero no creo que haya sido él.

Gastón asintió.

- El muy bastardo de tu marido debe venir como en una hora, todavía no es horario de visitas.

Ella se incorporó un poco más y él la ayudo.

- Y tu como entraste??

Él sonrió con suficiencia.

- Tengo mis contactos.

Rocío alzó una ceja.

- Peter te dejó entrar??

Él bufó.

- Sí.

Rocío se inclinó y lo besó.

- Gracias, hace cuánto tiempo estas aquí??

Gastón miró su reloj.

- Toda la noche.

Ella volvió a besarlo.

- No tenías porque.

- Por supuesto que si – tomó su mano – no sabes lo aterrado que estaba cuando te encontré pálida e inmóvil. Fue el momento más horrible de mi vida.  

- Pero ya pasó – ella acarició su rostro.  – ya estoy bien, estoy contigo y estoy aquí.

Él la miró con tristeza.

- Por ahora.

Ella lo besó.

- Para siempre.  

   …

- Veo que ya estas despierta.  – dijo Pablo observándola.

Rocío solo lo miró imperturbable.

- Cómo te sientes??

Pablo se sentó al pie de la cama y Rocío movió sus piernas alejándose de él lo más que pudo.  

- Me sentiré mejor cuando pueda irme.

Él asintió.

- Fue un golpe duro. Debes ser paciente y esperar a ver que dicen los doctores.

- Lo sé – Rocío miró al hombre frente a ella y deseó que fuera Gastón quien estuviera  allí – Pero por ahora voy a dormir me está comenzando a doler la cabeza.

Pablo asintió y se puso en pie.

Caminó hasta ella y la besó en la frente mientras depositaba un sobre en la mesita junto a su cama.

Ella lo tomó y lo abrió.

- Que es esto??

Pablo comenzó a caminar hacia la salida.

Ella leyó los papeles en su mano y abrió los ojos desmesuradamente.

- Los firmaste??

Él salió por la puerta sin responder.