Capítulo 29
::Rochi::
cuando estoy en casa,
veinte minutos después —y segura en
mi habitación, saco el
sobre blanco y lo abro.
Rochi, si estás
leyendo esto entonces Lali logró
llegar.
Lo siento por lo de
hoy —y la entrega a la vieja
escuela, pero es todo
lo que pude hacer. La abuela está bien.
No te preocupes como
sé que lo harás.
Quizás es para mejor
que no podamos hablar cara a
cara. En una carta,
puedo decir lo que necesito decir sin que
tus hermosos ojos me
distraigan del punto. Como siempre
lo hacen.
Y mi punto es este: Se
ACABÓ. Quiero decir el
contrato, no nosotros.
Nunca debí firmarlo en
primer lugar.
Puedo ir a la universidad
de un millón de maneras. Ya
no quiero el dinero
que este contrato trae. Mis objetivos
han cambiado. Y
ninguno de ellos valdrá si tú no estás en mi
vida.
Tú.
Tú + Yo.
Te estoy pidiendo que
salgamos. Pero de verdad. Di
sí. Arriésgate,
incluso aunque descubras rápidamente que
no merezco esa
oportunidad, o incluso estar en la misma
habitación que tú.
Pero aun así todavía
quiero esa oportunidad… quiero
estar contigo. Sé que
pensaste que quería que fuéramos
amigos. Pero no
quiero.
Quiero más.
Mañana. En
ThunderLand. Estoy esperando que
cuente como nuestra
primera cita real.
Tengo mucho más que
decir, mucho más que
contarte. Pero
necesito estar sosteniendo tus manos, y
mirando a esos ojos
que distraen para decir el resto.
Y si, como prometí,
estoy listo para escucharte. Pero lo que
sea que pase,
escúchame primero y… no me odies después.
Por favor. Nunca me
odies.
Está mal de mi parte
pedirte ese favor en esta nota,
porque ni siquiera
sabes lo que significa todavía. O que.
Pero… esto es un JUEGO
EN MARCHA, para mí, Rochi. Esta
carta es mi primera
jugada seria para tener tu corazón para
siempre… así que por
favor, recuerda:
No. Me. Odies.
La jugada número dos
también está en este sobre.
Esta noche (cuando
estés tratando de no dormir…
aunque desearía que lo
hicieras) te estoy pidiendo que
pienses en nosotros.
NOSOTROS. Nosotros estando juntos,
cuán buenos somos como
equipo. Cuánta diversión
tenemos como AMIGOS
porque a pesar de tu testarudez —
ambos sabemos que ya
lo somos.
Dios, desearía poder
ver tu cara cuando te hago esta
pregunta.
Aquí va: ¿Hay una
posibilidad de que pudieras
amarme? ¿Incluso un
poquito?
Porque yo lo hago… te
amo. Pensé que tú también ya
sabías eso.
De cualquier manera,
sin importar que pase mañana…
no voy a tomar nada de
lo que hay en este sobre de regreso.
Con amor. En serio. Te
amo. Con todo mi corazón.
Nos vemos mañana.
Gaston.
Una segunda forma de
papel rectangular, azul claro está todavía
dentro del sobre. Mi
corazón está palpitando, mis ojos ardiendo con
lágrimas, frustración,
rabia, y por supuesto absoluto deseo.
¿Cómo podría no estar
agonizando con eso después de leer lo que
escribió? Sus palabras
cambian todo.
Desafortunadamente,
también cambian nada. Tanto como desearía
poder aceptar sus
palabras y su amor —ninguna puede cambiarme en
alguien más. Alguien
diferente. Él no tiene idea a quien le está pidiendo
salir. Si él realmente
conociera mi yo real, él no lo habría pedido en primer
lugar.
Un novio, amor, y
cualquier tipo de relación normal no es para mí.
No tengo permitido tener
eso. Si lo tuviera, me habría curado hace
mucho tiempo. Sacó el
papel y lo abro. Es un cheque personal. De Gaston
Dalmau, hacer pagadero
a: Rochi Igarzabal, la suma de $ 4,000.00 en la esquina
inferior izquierda,
garabateó ―rembolso de pasantías‖. Agarro mi teléfono
y le escribo, con la
esperanza de que cuando salga del hospital donde la
red puede encontrarlo,
lo lea inmediatamente.
WTF. No hay
necesidad de estar despierta toda la noche
preguntándome.
Mi respuesta se mantiene. No. No. No. NO. No me voy
a quedar con
este dinero. Gracias, pero no. A todo, no. No te amo. Tú
no me amas.
Ni siquiera me conoces. Y me prometiste que no te
saldrías del
contrato. Voy a entregarte el cheque mañana.
* * *
No es hasta mucho más
tarde esa noche mientras estoy mirando
continuamente al
ventilador de techo dar vueltas y vueltas en mi
habitación, que
finalmente recibo la respuesta de Gaston:
En casa con
la abuela. Todo está bien. No voy a tomar un ‘No’
como
respuesta hasta que hablemos. Si te conozco. Y sí te amo.
Verás que
esto es correcto. Esta ahí a las 8AM, GF.
Antes de que pueda
escribirme otra vez, o peor, llamarme, apago el
teléfono sin
responder. Por primera vez en todo el verano, soy fácilmente
capaz de mantenerme
despierta todo la noche. Porque, ¿quién puede
dormir cuando tiene
una carta como la mía para leer, una y otra vez?

ME ENCANTAAA! Quiero que Ro no se enfade con lo que le diga Gaston y que porfin halla beso Gastochi. Por cierto me encanta que escrias tan seguido. Beso de una fan de esta nove
ResponderEliminaramo esta novela y quiero un beso de una vez jhuhgjb ♥
ResponderEliminar