
Capitulo 31
Me amas?? – pensé en voz alta atónita y el me tomo de los hombros.
- Desde el primer día que te vi en esa entrada, desde ese momento en que te mire a los ojos y te sonrojaste, te veías tan hermosa. – me soltó y comenzó a caminar en círculos sin apartar la mirada de mi – intente negarlo, decirme que solo era atracción física, pero ese momento en que simon te ataco me di cuenta de que algo tan fuerte no puede ser solo físico, cuando imagine que te pasaba algo sentí que moría.
- Esa noche… – ni siquiera se que iba a decir pero el no me dejo terminar.
- Esa noche, estabas tan asustada, tan frágil que se me partió el alma al verte – se acerco a mi – hubiera dado lo que sea por haberte evitado ese suceso, si hubiera estado allí contigo no te hubiera pasado nada y yo… – me acerque a el rápidamente.
- No fue culpa tuya – intente quitarle esa culpa.
- Si lo fue, cuando el apareció en la tarde y te sonrío con su dentadura perfecta quise estrellar mi puño contra esa cara presumida, entonces tu le sonreíste, te alegraste de verlo, y no me pude controlar, los celos me inundaron, la rabia de saber que tu nunca me verías así me cegó.
- Eso es estupido – dije irritada.
- Ya se que es estupido pero es lo que sentí – me dijo frustrado ((Que??))
- No hablo de ti- negué – hablo de tu conclusión. Estaba enojada contigo y el me vino como anillo al dedo para escaparme de ti. Por eso mi alegría.
- Ósea que no te alegrabas de verlo?? – pregunto mirándome claramente confundido.
- No. Solo de escaparme de ti.
- No se si eso me alivia o frustra aun mas. – sonreí.- de todas formas era mi trabajo protegerte y no lo hice. – se veía tan abatido.
- Eso me lo busque yo – dije intentando liberarlo de la culpa.
- Yo debí estar allí- dijo en un susurro.
- Y estuviste, evitaste que me hiciera daño – el era mi caballero.
- Si te hubiera pasado algo yo… - acaricio mi mejilla con una mano y cerro su puño en la otra.
- Estoy aquí, no me paso nada porque tú lo evitaste. – acaricie su mano que aun mantenía en mi mejilla.
- Volvemos al mismo punto… - suspiro – que hago yo enamorado de ti?? – no supe que contestar. – intente olvidarte, intente sacarte de mi cabeza, intente… – cerro los ojos y se aparto un poco de mi – luego ese beso – yo me sorprendí al escucharlo nombrarlo, después de ese beso ambos habíamos ignorado todo lo sucedido. – ese beso me hizo amarte aun mas. Pero tu…
- Yo que?? – quería entenderlo, saber que pensaba.
- Fue un impulso, lose. – (Que?? NO!!)
- Eso pensaste?? Que te bese por impulso??.- no entendía de donde había sacado esa conclusión, ese beso me había cambiado y el no lo veía.
- Estabas asustada, yo estaba allí, fui tu medio de escape y sucedió.
- No tienes idea. – le dije seria.
- Si, no tengo idea de que fue lo que me hiciste – me miro fijamente – rocio que me hiciste, me hechizaste, me… porque no puedo olvidarte??. – parecía dolido.
- Yo… - no sabia que contestar, me sentía confundida, el parecía dolido, amarme le dolía. –
- Es mejor que bajes princesa – se giro para darme la espalda. – kike te espera.
- Que?? No me voy a ir – me acerque a el.
- Princesa es lo mejor, olvida lo que te dije, has de cuenta que no sabes nada. – volvía a formar su mascara de frialdad y yo sentía que la sangre me hervía.
- No – hable exasperada, lo tome por el hombro y lo obligue a voltearse- no me pienso ir, no me pienso olvidar y me vas a escuchar…
- Princesa yo…
- Te callas, es mi turno. – me acerque a el y tome su rostro – gaston te amo. Que no lo entiendes, que no lo ves, mírame. Esa noche, en esa plaza, ese beso no fue un impulso, te bese porque te amo y esperaba que lo sintieras, esperaba que lo vieras en mis ojos, no hago más que quererte y tu solo me apartas de tu lado. No tienes porque soñar con que te mire, te miro, te veo, te deseo, me enamore de ti. Gastón mírame, estoy aquí, soy tuya. – cerro los ojos y sonrió.
- No sabes lo que he soñado que digas eso.
- No sueñes, te lo digo, es real, te amo, soy tuya, nose que fue lo que me hiciste. Pero me muero de amor por ti. – me miro a los ojos y yo sentí que moría lentamente, me regalo una de sus mejores sonrisas y yo le devolví el gesto. En un segundo el cuento pareció terminar, su expresión se volvió sombría.
- Esto no esta bien- dijo dando un paso hacia atrás-
- Que?? – estaba su cambio de personalidad me tenia confundida.
- No te merezco y tu mereces a alguien mejor, mereces un hombre… tan perfecto como tu. –
- Me estas jodiendo?? “un hombre tan perfecto como yo”?? gas no estoy ni cerca de ser perfecta – estaba dolida de que otra vez me apartara – que se supone que es ser perfecta?? Tener dinero?? En eso se basa la perfección?? – lo escuche negarlo pero estaba demasiado enojada como para detenerme. – si crees que soy tan perfecta como dices no me conoces, te enamoraste de una imagen no real. Al final eres un careta como todos basándote en el orden de la sociedad, el las posiciones sociales.
- Sabes que no es eso – negó.
- Y entonces que se supone que es?? Gas, deja de apartarme, déjate ser feliz, déjame ser feliz contigo, déjanos ser felices juntos. Nos lo merecemos.
- Tu te mereces a alguien mejor – dijo lanzándome una mirada lastimosa.
- Alguien mejor?? – repetí.- como quien?? Kike?? – por su mueca de dolor supe que fui cruel.
- Si princesa – susurro. – el seria mejor – una mueca de frustración cruzo su rostro – demonios!! El es el hombre perfecto para ti y eso solo me hace odiarlo mas.
- Porque rayos lo enredas todo?? – lo fulmine con la mirada- de donde sacaste la idiota idea de que el era mejor??.
- Rocio acaso no lo vez, esa foto – lo mire como si se hubiera vuelto loco.
- Que foto?? – casi le grite.
- La que te acabas de tomas, se veían tan perfectos juntos, son la pareja ideal.
- Y una mierda con la foto, a la mierda con la perfección – me gire y luche con las lagrimas, esto no solo se trataba de el, se trataba de todos. Me senté en el borde y observe el cielo.- estoy cansada de la “perfección”, estoy harta de que la gente no vea mas allá de mi sonrisa, pensé… - las lágrimas iban ganando. Se sentó a mi lado pero no se atrevió a tocarme.
- Yo… - comenzó a decir.
- No gaston – iba a desahogarme – a eso a lo que tu llamas perfección yo llamo mentira, caretaje y estoy harta de eso. Quiero que la gente vea mas allá de mi apellido, mas allá de mi sonrisa – lo mire mientras una lagrima caía- pensé que tu me mirabas, pensé que podías ver mas allá de mi sonrisa, mas allá de mi apellido – me calle – me equivoque – me levante, estaba dispuesta a irme.
- Nada de eso es verdad – dijo colocándose de pie detrás de mi.
- Ha no?? – di un paso hacía el – porque me alejas??
- Porque…
- Porque crees demasiado en el orden de la sociedad y piensas que es incorrecto el estar conmigo me restregué las lagrimas que caían y amague a irme; tomo de mi brazo y me retuvo.
- Nada de lo que dices es cierto, entiéndeme estoy tratando de cuidarte –
- Cuidarme de que?? Como?? – grite exasperada – alejándome de ti?? Apartándome de ti?? Así me proteges?? De que?? Que no ves que me haces daño?? Te haces daño!! – se acerco a mi y yo di un paso hacia atrás, no quería su cercanía. Me tomo de los hombros a pesar de mi resistencia y me pego a el, me abrazo y yo rompí a llorar en sus brazos.
- No cariño, no es así, perdóname – hablaba contra mi pelo – te amo y jamás haría algo para lastimarte, por eso necesito que sepas y entiendas que no soy bueno para ti.
- Porque?? - Susurre entre sollozos contra su pecho.
- Porque solo nos buscaremos un problema con tu padre – (tenia que admitir que tenia razón, mi padre jamás aprobaría esa relación) – solo aremos que se enfade, me eche y te castigue. – negué con la cabeza separándome un poco.
- Mi padre jamás nos haría eso – volvió a pegarme a el, como si no soportara la distancia –
- No sabemos como reaccionaria – suspiro – rocío, siempre has sido la niña perfecta – me separe para mirarlo – nunca haces nada malo, solo lo que te pide como y cuando te lo piden – lo mire sin pestañear – por eso eres perfecta – acaricio mi mejilla – y esa es tu debilidad, haces solo lo que los demás esperan de ti sin importar lo que sacrificas para satisfacer a los demás, princesa no eres tu misma, vives día a día cumpliendo los deseos de otros y te dejas de lado a ti misma.
- Tengo que hacerlo – agache la cabeza – soy todo lo que le queda, no puedo fallarle, no puedo fallarme. Es lo menos que puedo hacer por el después de la muerte de mi madre para alegrarlo…
- Ser tal y como desea?? Haber princesa cuantas clases extra curriculares tomas?? A cuanta gente conoces?? o a cuantas celebraciones vas?? Solo por cumplir, por ser lo que tu padre espera. – me tomo de la barbilla y me obligo a mirarlo – te conozco, te veo, se lo mucho que te gusta cantar y actuar –
- Y a que viene eso?? – le pregunte desviando la mirada –
- Porque no tomaste esos cursos este año – seguía evadiéndolo. – tomaste química y matemática avanzada solo porque el lo quiso así.
- Soy buena – me defendí.
- Lo odias – afirmo.
- Puede ser – acepte – pero…
- Pero era lo que tu padre quería que hicieras. – me interrumpió.
- No podía negarme – me defendí.
- No, por supuesto que no – acaricio mi pelo – a eso me refiero, no puedes negarte porque siempre estas haciendo lo que los demás esperan de ti – hizo una pausa significativa – y tu padre espera que seas perfecta – beso mi frente – por eso te desvives siendo perfecta – agache la cabeza.
- Cuando mi madre estaba viva mi padre aunque me amaba era apartado y distante- suspire – después del accidente se aferró a mi, volcó toda su atención, cariño, sueños y esperanzas en mi, jamás me había prestado tanta atención, nunca había esperado nada de mi porque estaba enfrascado en otras cosas, cuando eso cambio, cuando me convertí en su niña- la voz se me quebró – espera tanto de mi, no puedo desilusionarlo, sufriría de nuevo, no me lo perdonaría – volví a romper en lagrimas.
- Ho cariño, que carga estas llevando!!?? – me consoló al tiempo que me abrazaba. – ha esto me refiero cuando hablo de perfección, jamás te atreverías a hacer cualquier cosa que tu padre no aprobara, mucho menos causarle un disgusto con lo que sería nuestra relación.
Sabia que tenia razón, me sentía atada a hacer lo que mi padre quisiera por miedo a fallarle y esta demás decir que una relación con Gastón seria obviamente un disgusto inmediato, mas que eso, sería una desilusión para el.
- bésame Gastón – le pedí con lagrimas cayendo por mi rostro, mientras me rendía a lo que me decía, sabia que era cierto, no me atrevería a fallarle desobedeciendo. – Bésame, te lo ruego – quería sentirlo conmigo, sabia que podía olvidarme de todo entre sus brazos, ya lo había experimentado – bésame y ayúdame a olvidarme de todo.
Sonrío – si te beso, que me muero por hacerlo, me enamorare mas, si es que es posible, y es justo eso lo que no queremos.
Me acerque a centímetros de su rostro y rozando sus labios susurre – a la mierda con todo.
Uní mis labios con los suyos, con amor, deseo y casi desesperación, quería dejar de pensar y el era mi mejor soma, pase mis brazos por su hombros y mi me apegue mas a el, me tomo de la cintura he intensifico el beso. En sus brazos me sentía segura y completa, todo cobraba sentido y era feliz, no me quería ir de allí jamás y ahora que sabía que me amaba algo había cambiado, algo iba a comenzar, lo sabia.
Fin flashbacks.
No hay comentarios:
Publicar un comentario