Gracias a todas las que pasan como siempre, este Capi va por Luci que no me deja descansar pidiendo Nove (te quiero brujita), les voy avisando que queda un capitulo más y me tomare unas pequeñas vacaciones de la nove, asique la próxima semana tendrán nove y de ahí no volvemos a ver hasta Octubre, espero me entiendan y les siga gustando la nove, sin más Capitulo
Capítulo 83
Al llegar al departamento Rochi fue directa a la cocina para
preparar algo de almorzar. Gaston la dejó su espacio para que pensase en todo
lo que había ocurrido. Él también lo necesitaba. Se tendió en el sofá y maldijo
su mala suerte.
El ex novio de su gran amor volví a por ella. Y estaba
seguro de que así era. Le había dejado claro que estaba soltero y hasta le
había hablado a su hija de ella ¡Mald¡to fuera, le había puesto su nombre! Ese
tipo la quería reconquistar. Pero él no podía negarle que lo viese si es lo que
ella quería hacer. Por mucho que le pudiese doler. Tenía tanto miedo de que
ella lo aceptase, que estaba a punto de ir corriendo hasta la cocina y
prohibirle que se acercase a él. Pero con ello solo conseguiría que lo fuera a
buscar con más urgencia. A Rochi no se le podía prohibir nada, lo había
aprendido hacía muchos años. Y tantos años no le servían de nada en esos
momentos. Había un trozo de su vida que él desconocía y que ese tipo parecía
conocer a la perfección ¡Cuanto lo odiaba! De todas las maneras posibles. El
amigo posesivo estaba celoso de los conocimientos que él tenía y el novio no
soportaba que ese tipo hubiese sido el primero. Porque estaba convencido de que
ese habría sido el primero. El chico que cuando ella tenía solo dieciséis años
la había amado como a él le habría gustado hacer. Y también la había dañado ¿Se
habría enamorado de él y no la correspondía?
El pensar que ella pudiese haber amado a otro le hizo
encogerse de dolor. Sin poder evitarlo caminó hasta la cocina. Ella preparaba
algo de pasta, con la salsa favorita de Gaston. Sonrió con la imagen. Deseaba
tanto poder verla el resto de su vida, que no estaba seguro si sería capaz de
dejarla salir de esa habitación.
- ¿Puedes esperar unos minutos? -preguntó Rochi sacándolo de
su ensueño.
- ¿Qué? -no entendió el chico.
- Aún no terminé de hacer la comida y lo que quieres que
hablemos nos llevará un rato ¿Esperas hasta que termine? -preguntó Rochi con
una dulce sonrisa.
Él solo asintió y salió de la cocina. Ella si lo conocía
bien. Le contaría todo lo que pasó entre ellos, en cuanto acabase de cocinar.
De pronto, el miedo se apoderó de él ¿Quería escucharla
decir que se había enamorado de otro? ¿Qué le contase su historia de amor y
cuanto había sufrido por perderlo? No estaba muy seguro de estar preparado ¿Por
qué tenía que pasar todo aquello en ese momento? Al fin la tenía a su lado,
sabiendo que les unía el amor ¿Por qué tenía que aparecer ese tipo?
Rochi salió de la cocina con dos platos y ambos los
degustaron hasta quedar saciados. Una vez que él recogió el almuerzo, se sentó
junto a ella y la abrazó, a la espera de que ella comenzase su historia.
- Como habrás deducido, Pablo era el chico con el que te
dije que había estado saliendo antes de que regresaras -comenzó Rochi,
acariciándole distraídamente el pecho.
- Sí, lo imaginé -corroboró él.
- Cuando tú te fuiste, yo comencé a salir con los chicos más
a menudo. No tenía con quien más hacerlo -se encogió de hombros la chica con
resignación- Un día Daniela y yo íbamos al encuentro de los chicos, cuando ella
se fijo en Pablo. Él era mayor y muy guapo y ella cayó rendida a sus pies. Hizo
que nos presentásemos y él fue muy educado, pero ni la miro.
- Te prefirió a ti -anunció Gaston, disimulando la
irritación.
- ¡Para nada! Creo que al principio creía que yo era un
chico -explicó ella riendo- Pero empezamos a vernos a diario, jugábamos a
baloncesto y hablábamos por horas.
- Él es el que me sustituyo -afirmó Gaston, sin disimular la
irritación esta vez.
- Podría decirse. Necesitaba un amigo y él estaba allí.
Gaston quiso gruñir ante la afirmación. Estaba claro que lo
culpaba por haberse ido. Él también lo hacía. Si se hubiese quedado nunca le
habría dejado acercarse a ese tipo.
- Pasábamos el día juntos -continuó Rochi, aún acurrucada
junto a él- En mi casa o en la suya. Conocía a toda su familia. Normalmente nos
tocaba cuidar a su hermana menor, mientras la madre salía a hacer sus compras.
Me presentó a muchos amigos y comencé a cambiar en mi estilo de vestir y de
comportarme. Se puede decir que hizo aflorar mi lado femenino. Él tenía a sus
amiguitas y yo estuve con algunos chicos.
- ¿No se ponía celoso? -preguntó él extrañado.
- Solo éramos amigos, no pareja. Y tú eres el único que con
solo el titulo de amigo se sentía con derecho a estar celoso -bromeó la chica
abrazándolo.
- Es que no me gusta compartirte -gruño Gaston, aferrándola
posesivamente.
- No te preocupes ¿sí? -le pidió ella acariciándole la
mejilla- Él nunca sería una amenaza para ti. Es el último hombre al que
desearía ver.
Y era eso lo que más le preocupaba a él. Rochi no era de las
que odiaban. Cuando alguien se atrevía a enfrentarse a ella, Rochi solía tomárselo
a la ligera e ignorar la afrenta. Después, de por supuesto, haber dejado en
evidencia a quien se atreviese a retarla. Pero ella nunca guardaba rencor. Y
ese odio que procesaba a ese hombre, le preocupaba muchísimo ¿No lo habría
olvidado? Tenía que saber qué era lo que había pasado entre ellos.
- ¿Qué es lo que pasó entonces entre vosotros? -quiso saber
sin perder tiempo.
- Pues un día de repente me confesó que me amaba y... -se
interrumpió para mirar a su novio ¿Cómo podría decirlo sin que él quisiese
matarlo?
Gaston sintió como el miedo se apoderaba de todo su cuerpo
¿Iba a decirle que ella también lo amaba? Sí, estaba seguro de ello.
- ¿Y? -repitió Gaston con irritación.
- Fue entonces cuando él y yo... ya sabes -dijo la chica
haciendo un leve gesto con la mano.
- ¡Ah, lo hicisteis! -suspiró Gaston de alivio, y se obligo
a no pensar en ese tema.
- ¡Sí! Poco después él se tuvo que ir con toda su familia
fuera del país -concluyó Rochi con un rastro de tristeza.
- ¿Te dejó después de...? -gruño airado Gaston.
- No fue así -intentó justificarlo Rochi- A su padre le
habían dado un nuevo trabajo y él entraba en esa universidad.
- Pues si sabía que se iba a ir podía haber mantenido las
manitas quietas -bramó su novio, colérico.
Ella pensaba exactamente igual. Pero si lo decía, él iría a
por Pablo y lo mataría. Y no es que le preocupase en exceso lo que le pasase
pero no quería que metiesen en la cárcel a su novio.
- Eso ya no importa. Él se fue y yo lo pasé un poco mal pero
me recuperé. Después tú volviste y regresé a tener la vida que tenía antes de
conocerlo -aclaró Rochi, queriendo zanjar el asunto.
- No es cierto. Nunca lo has superado porque desde que ese
tipo te hizo daño te has negado a dejarte amar. Y cuando yo volví no eras la de
siempre. Pensé que me guardabas rencor por irme, pero ahora sé que no era eso.
Intentabas fingir ser quien no eras. Intentaste volver a ser uno más de los
chicos cuando sabías que ya no era posible. Por eso creaste esa doble vida. Y
excluiste a todos de ambas, para que nadie pudiese conocerte al cien por cien
-explicó Gaston, viendo todo al fin claro- Él te hizo dejar de creer en el
amor.
Rochi no pudo soportar escucharlo ni un minuto más. Se
levantó del sofá y corrió hasta encerrarse en el baño. Era de la última persona
de la que aguantaría escucharlo. Podía tener razón, pero ni siquiera sabía lo
que estaba diciendo. Se había enamorado y la había abandonado era lógico que
sufriese por ello. Era normal que se pusiese una coraza para que nadie más la
dañase ¿Cómo se atrevía a juzgarla por ello?
Gaston quiso destrozar la casa de pura rabia. Él tenía razón
¡ella se había enamorado de ese tipo! No soportaba la idea ¿Aún lo amaría?
¿Sería ese tipo su gran amor? ¿Podría olvidarlo alguna vez y aceptarlo a él?
Gaston no podía con todas las emociones que se agolpaban en su pecho. No podía
perderla. Aunque... ¿realmente la había tenido alguna vez? Ella no podría tener
una vida real hasta que no espantase los fantasmas de su pasado. Pero Gaston
temió que esos fantasmas se convirtieron en su futuro y él solo fuese un
recuerdo.
No podía estar allí ni un minuto más. Salió del departamento
cerrando enérgicamente tras de él.
Fin Capi
*Mafe*

noo quiero más cap!!
ResponderEliminarMe encanto!
me encanta, escribes increíble. Espero que no se separen por culpa de Pablo, Gastochi por siempre.
ResponderEliminarMuy buen cap.! Aww no quiero que peleen por culpa de etse tipo ajjaa
ResponderEliminarQuieroo màs..! :)
Haaayy que tarado que es Gaston por dioss!!!. Osea Rochi ya le dijo que lo ama! que quiere estar con el!!:. Que no sea tonto!!!.. Maldito el momento en que apareció Pablo!!!
ResponderEliminarVes porque te mato virtualmente después??!! ... No, Ni siquiera están peleados por lo mismo...
ResponderEliminarRochi que no quiere que la juzguen.
Gastón que duda del amor de la rubia...
No puedes hacer eso... Quiero que se reconcilien... :(
Genia escritora... amo tu nove igual... Besos.
jjajajaja yo soy lucia la la que no deja en paz a mafe pero ella ya sabe que la quiero un monton y que no puede restirrme y bueno genial como siempre el capitulo.. besos <3
ResponderEliminarWow, que tenso que esta todo, y es logico como esta Gaston, me parece que Rochi lo esta dejando un poco de lado, y al parecer le omitio algo, no se. Pero bueno, esperemos que todo se arregle, quiero otro!!!!!!!!!!
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